miércoles, 19 de febrero de 2014

Para qué morir, si no es contigo

Podrías ser mi himno nacional
si tú tan sólo te arriesgaras.

Quedémonos en cama esas noches de Abril
viendo una televisión en blanco y negro,
donde el frío nos consuma
y el calor de nuestros cuerpos nos evapore.

Vamos a desvanecernos en las sábanas blancas
y que el único reflejo que exista sea el de nuestros ojos
brillando como diamantes en un paraíso oscuro.

Perder trenes,
perder la noción del tiempo,
perderme, incluso a mí mismo,
menos a ti,
porque en tus ojos encontré un lugar perfecto donde habitar
y cada vez que los veo son una bonita forma de morir.

Hagamos el amor en vez de follar,
porque follar lo hace cualquiera,
pero hacer el amor, pocos.

Escribo porque eres poesía,
eres inspiración,
eres una hermosa poetisa
que un día inspiró a un escritor.

Escribamos juntos una historia
donde el borrador tenga envidia
porque no lo usamos ni lo usaremos jamás,
una historia,
quizá,
la más increíble de nuestras vidas.

Hagamos recuerdos que nadie nunca pueda reemplazar,
momentos que al recordarlos se nos dibuje una sonrisa
de extremo a extremo.

No te prometo un para siempre,
pero sí una gran historia.
Porque...
para qué morir, si no es contigo.

4 comentarios:

  1. Excelente. :-)
    Para que morir, si no es contigo, eres la brújula que guía la dirección de mi vida

    ResponderEliminar
  2. AaaaWww. Q linda carta d amor, m encanta saber q ay personas como tu y yo q nos tomamos el tiempo para hablar al amor

    ResponderEliminar