jueves, 19 de febrero de 2015

Brooklyn

Mírala, por fuera pareciera que nada le pasara, pero por dentro pelea contra sus demonios, sobrevive a vorágines y lucha por salir a la superficie de su naufragio. Brooklyn, se llamaba. No sabes cuánta tristeza le cabe en los ojos, ha tenido que ser testigo de las peores catástrofes de su vida, llora su felicidad y sonríe su dolor, esa es su forma de convertirse en una chica de otro mundo. Es triste con instintos suicidas, tiene en sus muñecas líneas horizontales y verticales que dan por cierto aquello que dice la gente: que está llena de cicatrices. 

Por las noches se convierte en una chica muy diferente a la te sonríe en el día, se jode, se hunde con sus pensamientos, no sabe cómo sobrellevar la situación, así que prefiere reproducir música y dejar que hable por ella. Se pone un arma en las cien, se balancea sobre la silla y dejar salir el último aliento a la oscuridad. 

El frío la abriga.

Tiene la mirada perdida en el infierno del ayer, es pasado pero ella aún no supera tanta realidad, le cuesta mucho digerirla. No todos tienen la misma fuerza para enfrentarse a sí mismos con los que fueron. Ella fue ingenua, se dejó engañar fácilmente, le rompieron el corazón, no una ni dos, sino las suficientes para que se convirtiera en la chica que ahora es. No sabe amar de otra forma que no sea rompiendo, lastimando, incluso si ella no quiere, lo hace involuntariamente, ya no sabe cómo amar sin hacer daño. Le han pintado tantas fantasías en el lado oscuro del cielo, ahora ya no cree en las promesas, ya no cree en las palabras, tampoco en lo hechos. Ella simplemente se está dejando llevar por el viento, sin esperar nada del destino, ella se deja arrastrar como en otoño lo haría una hoja seca. Está seca por dentro, sus flores están marchitas y sus raíces están ahí, siempre estarán las raíces que la ataran desgraciadamente a otras personas.

Tanto desastre para una chica que solamente quería ser feliz, 
tanta realidad para una chica que tenía fijados muchos sueños. 
Tiene cicatrices, es cierto, pero cicatrices de realidad.

Es la chica que, en lugar de que le rompan el corazón, es la que lo rompe primero.

2 comentarios:

  1. Viva por fuera, muerta por dentro, justo asi me siento. Escribes hermoso, no puedo parar de leerte.

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  2. me abstengo, se cuanto duele.
    ¿por qué hacer que otra alma pase por ello?
    -J

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